Guía post-pandemia para salir a comer a un Restaurante
Porque todo ha cambiado en el último año, y ahora hay que adaptarse.
Aunque la pandemia ha afectado a casi todas las industrias imaginables, el efecto que ha tenido en los restaurantes, sus trabajadores y su capacidad para permanecer abiertos y al servicio del público ha sido enorme. Mientras que algunos de nuestros lugares favoritos han hecho cambios para ayudar a servir a la comunidad convirtiéndose en tiendas de comestibles y proporcionando a los necesitados recursos esenciales, otros se han adaptado al cada vez más popular formato de cocina fantasma (es decir, cocinas emergentes que sólo hacen entregas). Sin embargo, nuestros lugares favoritos han encontrado una manera de mantenerse a flote durante el último año, estamos emocionados de verlos reabrir junto con la reintroducción de la comida en el lugar.
Al igual que los restaurantes se han adaptado en el último año, ahora los comensales tenemos que hacer lo mismo. Las cosas han cambiado, las viejas rutinas ya no se aplican, y si no has salido en meses, todo puede parecer bastante confuso. Honestamente, todavía nos estamos adaptando a los cambios, es por eso que hemos reunido las siguientes directrices para tener en cuenta la próxima vez que decidamos comer fuera de casa e ir a un restaurante.
Las propinas se hacen más comunes.
El año pasado se demostró que los trabajadores de los restaurantes son considerados trabajadores esenciales y merecen un reconocimiento extra. Dejar una propina entre el 5%-10% del monto total de la Factura de consumo es cada vez más común en los restaurantes, por lo que se debe considerar al momento de planificar una salida y controlar los gastos.
Respete el aforo y Llame si se retrasa
A medida que los restaurantes vuelven a funcionar con una mayor capacidad, muchos de nuestros lugares favoritos se están convirtiendo en lugares en los cuales es necesario realizar una Reserva para adaptarse a los límites de capacidad y aforo establecidos. Por eso es importante, ahora más que nunca, evitar faltar a una reserva. Cancele con antelación o, si se retrasa, aunque sea 15 minutos, llame e intente cambiar a un horario posterior.
Sea consciente de la hora
Atrás quedaron los días en los que nos sentábamos a disfrutar de una botella de vino o tomar café durante “horas” mientras dábamos lentos bocados a los postres. En la actualidad, la mayoría de los restaurantes va estableciendo períodos de 90 minutos para almorzar o cenar. Si el anfitrión le hace saber que hay un límite, sea cortés y respételo, recordando cuándo se acerque el final para pedir la cuenta, pagar y dejar el restaurante.
Ahora todo es digital
En el último año, un montón de restaurantes se han vuelto totalmente digitales, desde la sustitución de los menús en línea por los de papel (a los que se accede en el teléfono a través de un código QR), hasta la renuncia al dinero en efectivo y la utilización de tarjetas de débito/ crédito o pagos a través de otras plataformas digitales. Si tiene problemas con el acceso a datos de su teléfono Celular, la mayoría de los restaurantes tienen un menú de papel de repuesto para prestarle, o una contraseña wifi para un mejor acceso.
Lleva una máscara (y úsala cuando sea necesario)
Aunque no tengas que llevar la máscara en tu mesa (porque, ¿cómo vas a comer?), la mayoría de los lugares piden que la lleves en las zonas comunes, como cuando vas al salad bar, al baño o cuando te mueves por el local.
El uso de desinfectantes como el alcohol en gel, u otros para las manos al entrar a un Restaurante y también al tomar lugar en una mesa, se han hecho prácticamente obligatorias, por lo que debemos mostrarnos considerados con esta práctica y colaborar con las medidas de bioseguridad establecidas.
Que otro aspecto considera que se debería tomar en cuenta?. Déjenos su comentario.
